LOS ANGELES.- La célebre pareja formada por Kobe Bryant y Shaquille O’Neal, que dominó la NBA al comando de los Lakers de Los Angeles a principios de siglo, se volverá a juntar este fin de semana en la 58 edición del partido del All-star.

El duo que liderara a los Lakers hacia tres campeonatos seguidos volverá a coincidir mañana domingo en el mismo equipo, uniendo fuerzas en la Conferencia Oeste.

Phil Jackson, entrenador de los Lakers, dirigirá al Oeste y volverá a hacer de pacificador entre Bryant y O’Neal, como ya sucediera en tiempos pasados.

El reencuentro El reencuentro, esperado por los fans y los medios, no será ninguna ocasión especial para el MVP Bryant.

“No he pensado nada en ello”, dijo Bryant al diario angelino “Los Angeles Times”. “Preguntar a Phil (Jackson) por ello, no a mí”.

“Se lo pasarán muy bien”, dijo Jackson al periódico.

“Habrá muchas risas porque así es Shaq”.

“O’Neal y Bryant fueron compañeros en los Lakers de 1996 a 2004. A pesar de sus diferencias ganaron el anillo de campeones en 2000, 2001 y 2002. Después O’Neal fue traspasado a los Miami Heat.

Hace más o menos un año O’Neal fichó por los Phoenix Suns, ciudad que acogerá el All-Star por primera vez desde 1995. El pivot jugará el partido de las estrellas por decimoquinta vez en su carrera.

Ningún jugador en activo alcanza sus números.

“Siempre soy el anfitrión”, dijo O’Neal, elegido dos veces como mejor jugador del All-Star, al igual que Bryant. “Soy el padrino de la NBA”.

Oeste internacional O’Neal y Bryant formarán parte de un conjunto del Oeste más internacional que nunca.

El pivot chino Yao Ming de los Houston Rockets formará de inicio, mientras en el banquillo esperarán su turno el español Pau Gasol de los Lakers, el alemán Dirk Nowitzki de los Dallas Mavericks y el francés Tony Parker de los San Antonio Spurs.

En el quinteto titular estarán, además de Ming y Bryant, el base Chris Paul de New Orleans Hornets, el alero Tim Duncan de San Antonio Spurs, y Amare Stoudemire de los Phoenix Suns.