SANTO DOMINGO.- El ex receptor dominicano Tony Peña sabe lo que se necesita para ser dirigente en las Grandes Ligas y tiene todo el deseo de recuperar esa condición aunque entiende que lo sucedido en el pasado podría afectarle.

“Sé que mi renuncia de los Reales podría afectar mi futuro como dirigente, pero no descarto volver a hacerlo”, dijo Peña durante una entrevista en el programa La Semana Deportiva, que se produce por Telecentro, los domingos de 12 a 2 p.m. Peña no quiso hablar de los motivos de su renuncia de los Reales y se limitó a decir que se debió a problemas personales.

“Hay cosas que uno aguanta hasta un punto”, señaló Peña al ser cuestionado al respecto.

Peña es actualmente coach de la banca de los Yanquis de Nueva York y admitió que en el último año no ha recibido ninguna oferta para dirigir, ni siquiera para entrevistarse por un puesto.

“La situación es la siguiente: Yo le pedí al gerente general Brian Cashman que no quería que me entrevistaran simplemente para cumplir un requisito de incluir a alguien de la minoría en el grupo de entrevistados. Que si me iban a entrevistar fuera por un interés real en mis condiciones, no solo por mi raza”, agregó.

Como coach de los Yanquis, cualquier interesado en entrevistar a Peña para un puesto dirigencial debe pedirle permiso a la gerencia del conjunto de Nueva York antes de poder acercarse al dominicano.

Sobre los Yanquis Al ser cuestionado sobre la razón del desplome del conjunto de los Yanquis en la temporada del 2008, citó las lesiones como la causa principal de esa debacle.

“El peor trauma de los Yanquis fueron la lesiones. Tuvimos a Alex fuera, a Posada por gran parte de la temporada, también a Matsui y finalmente fue Wang. Por eso nos quedamos fuera”, opinó el ex ganador del premio Manager del Año.

Consideró de excelente la relación con el actual dirigente Joe Girardi y descartó que los problemas personales de Alex Rodríguez hubieran afectado la concentración de la organización.

“Lo que pasa fuera del terreno se queda fuera, y en el caso de Alex eso fue así. En los Yanquis somos como una gran familia y puedo decir que las cosas se manejaron bien todo el tiempo”, comentó.

Aplaudió las inversiones con las contrataciones de CC Sabathia y A.J. Burnett para reforzar el pitcheo.

Podría volver a dirigir en RD
Peña dirigió por última vez en el país a las Aguilas Cibaeñas y posteriormente fue por unas horas dirigente de los Leones del Escogido, antes de una renuncia antes de siquiera ponerse el uniforme por primera vez.

Consideró que esa situación se debió a que “los sentimientos pudieron más que yo mismo”. Sin embargo, no descartó volver a dirigir en el béisbol invernal dominicano, con cualquier equipo, aunque admitió que es algo que no le hace falta.

“No me hace falta dirigir en el invierno, pero no es algo que yo descarte de plano”, indicó. También habló de la presencia de sus hijos T.J. Peña y Francisco Peña, ambos miembros de las Aguilas Cibaeñas.

“La primera vez que los vi jugando juntos me puse nervioso, hasta me sudaron las manos. Para mi, como padre, es una presión que ambos estén con las Aguilas Cibaeñas, que fue mi equipo porque me imagino lo que ellos pueden ser y lo que quiero que sean al seguir mis pasos”, relató.

Dijo que en ningún momento guió a sus hijos a tomar el camino del béisbol sino que ellos mismos dieron sus pasos en esa dirección.

“Ellos dos decidieron ser peloteros. Yo creía que TJ iba a ser catcher, pero fue al revés y esa posición fue para Francisco. TJ no jugó mucha pelota antes de firmar. Recuerdo que un día me llamó y me dijo que iba a firmar, entonces yo le dije que llamara a su mamá y le pidiera permiso, porque me estaba diciendo que no quería estudiar”, recordó.

Consideró que TJ ha madurado mucho como pelotero, tanto defensiva como ofensivamente y consideró que si TJ batea para .270 “va a ser un ganador del Guante de Oro”. Resaltó las grandes cualidades de Francisco, quien con apenas 19 años de edad, está proyectado a ser un tremendo receptor de Grandes Ligas.