MADRID.- El estado depresivo que viven el Real Madrid, líder absoluto de la Liga española, y el Barcelona, único equipo del país en la Liga de Campeones, demuestra que los puntos y las posiciones en la tabla no lo son todo.

La exaltación del vaso medio vacío domina a los dos grandes de España.

Curioso, por lo menos, porque el Barcelona es segundo en el campeonato y jugará los cuartos de final de la Champions League frente a un equipo teóricamente inferior como el Schalke 04. Pero para los catalanes parece que el suelo se abrirá en cualquier momento bajo sus pies. El conflicto suscitado por la lesión o no lesión de Ronaldinho y los recurrentes inconvenientes físicos de la plantilla son el germen del catastrofismo.

“Primer puñetazo para Ronaldinho”, se tituló hoy una columna del diario catalán “Sport”, que no duda en decir que el jugador fue “desenmascarado” por haber constatado los servicios médicos del club que no tiene dolencia alguna, razón esgrimida por el entrenador Frank Rijkaard para justificar la ausencia del brasileño en Almería.

Lesiones
La seguidilla de lesiones aporta también su miga. En los meses que se llevan jugados de la temporada, el equipo azulgrana sufrió 49 lesiones, que obligaron a los involucrados a pasar 1.058 días de baja. Sólo Víctor Valdés, Andrés Iniesta y Xavi Hernández no pasaron por la enfermería todavía.

El dato, además de centrar los análisis de la prensa, sacudió a un referente de la talla de Johan Cruyff, que en su columna semanal en “El Periódico de Catalunya”, señaló: “No soy médico ni piso el vestuario, pero me extraña que en el momento decisivo haya que completar una lista de convocados con tres chavales del filial”.

A ello se le suman las declaraciones de Xavi, que cree que al equipo “le falta un punto de madurez y saber competir”, pese a seguir vivo en Europa.