SANTO DOMINGO.- El derecho de Grandes Ligas Ervin Santana estuvo intransitable anoche y aisló cuatro imparables en 5.2 tercios de entradas para que los Tigres del Licey derrotaran a los Gigantes del Cibao por blanqueada de 4-0 en partido celebrado en el estadio Quisqueya, dentro del Round Robin del torneo de béisbol invernal. Con su triunfo los azules colocan su marca en 6-5 y se quedaron solos en la segunda posición, debido a que las Aguilas Cibaeñas (5-6) fueron valupeadas por las Estrellas Orientales 8 carreras por 2 en el estadio Tetelo Vargas.
Los Tigres se mantienen a juego y medio de las Estrellas Orientales (7-3), que cada día se acercan más a la clasificación a la serie final, mientras los Gigantes (3-7) ven reducidas sus posibilidades de llegar a la última etapa del torneo.
Es el tercer partido corrido que le ganan los bengaleses a los nordestanos para poner su serie particular 3-1 en el todos contra todos y además los lanzadores azules extendieron a 13 las entradas sin permitir anotaciones.
Mientras Santana navegó sin problemas, El veterano José Offerman conectó un sencillo al bosque derecho que remolcó a Ronnie Belliard desde segunda para que los Tigres aseguraran su victoria en la misma primera entrada.
Emilio Bonifacio había disparado sencillo al centro iniciando el inning y Belliard bateó para force out del uno al seis. José Guillén pegó infield hit por el campocorto y Willy Aybar se ponchó, preparando el escenario para el hit de oro de Offerman.
Licey marcó otra en la tercera por doblete al jardín derecho de Bonifacio, sencillo al centro de Belliard y Guillén bateó para doble matanza por la vía 643, anotando en la jugada Bonifacio.
Los azules produjeron dos más en la cuarta.
Santana aceptó cuatro indiscutibles, otorgó una base por bolas y abanicó a seis para colocar su marca en 1-1, en tanto que el zurdo Fabio Castro fue el derrotado 0-1.
PUNTOS CLAVES
DEFENSA Y PITCHEO: Estos fueron dos factores claves para la victoria de los Tigres del Licey. Por un lado, Yordany Ramírez dio una gran exhibición de fildeo que quizás evitaron la producción de carreras de los Gigantes y por otro, el gran pitcheo de Ervin Santana.