Con la superestrella Usain Bolt casi de vacaciones en un año sin gran cita internacional (Mundial o Juegos Olímpicos), el atletismo vivió una temporada de transición, en la que el francés Renaud Lavillenie y el keniano Dennis Kimetto fueron los protagonistas con sendos récords mundiales.

Lavillenie consiguió batir una de las plusmarcas míticas, la de salto con pértiga, superando en sala la barra de 6,16 metros en la reunión de Donetsk (Ucrania) en febrero, lo que le permitió destronar al gran ídolo local, Sergei Bubka, que había conseguido 6,15 metros en sala en 1993 y 6,14 al aire libre un año más tarde.
“Se abre una nueva era en este deporte. El vencedor es un campeón olímpico, alguien que ha logrado muchos éxitos. Esperábamos que esto pasara y estamos contentos con que haya llegado precisamente aquí”, dijo entonces Bubka a la AFP.

Lavillenie fue elegido a finales de noviembre el mejor atleta del año en gran parte por ese logro, en una gala en Mónaco donde la vencedora en categoría femenina fue la neozelandesa Valerie Adams, invicta desde hace 56 concursos de lanzamiento de peso.

Récord keniano
El otro gran récord mundial batido este año fue el de maratón, con la victoria del keniano Dennis Kimetto a finales de septiembre en Berlín. Fue el primer corredor de la historia en bajar de la barrera de las 2 horas y 3 minutos en la mítica distancia, para dejar el crono en 2h 02 min 57.

Por sexta vez, la capital alemana veía a un hombre batir el récord del mundo de maratón, desde que lo consiguiera el brasileño Ronaldo Da Costa en 1998.

Pero más allá de estas citas con la historia y los libros de estadísticas, el año fue de transición para la mayoría de las grandes figuras, al no tener que preparar ni un Mundial de aire libre ni unos Juegos Olímpicos. Fue así especialmente para la gran estrella de este deporte, Usain Bolt, que apenas compitió en este 2014.

El ‘Rayo’ jamaicano
Bolt participó en tres carreras, todas en agosto. Una de 100 metros de exhibición en la playa en Rio de Janeiro (10.06), con los relevos 4x100 metros de su país en los Juegos de la Commonwealth en Glasgow (37.58) y de nuevo en 100 metros en la reunión de Varsovia (9.98).

En las tres ganó, pero su temporada estuvo marcada por un problema físico en un pie, que retrasó su preparación y que le hizo dar por terminado el curso atlético antes de lo previsto, a finales de ese mes de agosto.

“El cuerpo de Usain Bolt ha dado espectáculos formidables a lo largo del último año. Pero es sólo un cuerpo, no una máquina”, afirmó Patrick Magyar, director de la reunión de Zúrich, al anunciar que Bolt no iba a participar en la pista suiza porque necesitaba tomarse un respiro.
El resto de estrellas tuvieron como principales desafíos las citas de la Liga de Diamante, donde ganaron las clasificaciones generales de sus respectivas pruebas nombres como los estadounidenses Justin Gatlin (100 m) y Allyson Felix (200 m), la jamaicana Veronica Campbell-Brown (100 m) o Lavillenie (pértiga).

Marca de Ibargüen
Entre los latinoamericanos brilló de nuevo la colombiana Caterine Ibargüen, que batió su récord sudamericano (15,31 m) y que reinó en el triple salto en el circuito de la Liga de Diamante, donde también se impusieron en la general la brasileña Fabiana Murer en pértiga y el panameño Alonso Edward en los 200 metros.

En 2015 todos ellos tendrán un gran reto que se llama Mundial de Pekín, donde de nuevo las miradas estarán centradas en Bolt, en su regreso al estadio ‘Nido de Pájaro’ donde se reveló al mundo en los Juegos Olímpicos de 2008.